¿UN NUEVO TRIÁNGULO DE LAS BERMUDAS EN EL ESTRECHO DE MALACA?

La misteriosa desaparición de un Boeing 777 nos lleva a plantearnos todas las interrogantes posibles ¿Podemos descartar que la aeronave haya atravesado un vórtice espacio-temporal? 

Un Boeing 777 despegó del aeropuerto internacional de Kuala Lumpur a las 00:41 horas con destino a Pekin donde tenía previsto llegar a las 06:30 horas (horario de Asia) El vuelo MH 370 llevaba a bordo a 229 personas, entre tripulación y pasajeros, pero nunca llegó a su destino. ¿Uno de tantos accidentes aéreos? No se puede descartar en absoluto, sin embargo este caso está rodeado de un tupido velo de misterio que lo hace especialmente singular. A las 01:30 horas los controladores perdieron contacto con el avión. Y ya nada más se supo de su paradero. Los dispositivos de búsqueda y salvamento, tras casi una semana, no han logrado dar con su rastro. No hay evidencias de que se haya estrellado en el mar o sobre tierra y todo son especulaciones e hipótesis acerca de un probable desvío de su ruta. Nada se sabe sobre el destino de este moderno Jet de fabricación norteamericana ni de sus ocupantes. Todo son, de momento, simples teorías y muy pocas evidencias.

 Los controladores han establecido la posibilidad que ante un fallo mecánico en cualquiera de sus sistemas, la aeronave describiese un amplio giro para tomar un nuevo rumbo alternativo hacia otro lugar, sin embargo parece como si hubiera sido tragada por la tierra… o el espacio. Llegados a este punto podemos hacer un sinfín de conjeturas que no por fantásticas o increíbles, a la luz de nuestros conocimientos actuales, pudieran dejar de ser ciertas. Y aquí es donde nos preguntamos muchas cosas y barajamos infinidad de posibilidades. Una de ellas, tan inquietante y desconocida como increíble, sería que el avión hubiese cruzado un vórtice espacio-temporal. Imaginemos por un momento que así ha sido. ¿Dónde estaría el avión y sus pasajeros en este momento? ¿En el pasado o en el futuro? Es muy difícil saberlo. Lo más inquietante es que algunas horas después de verificarse la desaparición, los teléfonos móviles de muchos pasajeros seguían funcionando y daban señal. 

En caso de haber caído al mar o a tierra el impacto los hubiera destrozado y dejado inservibles y sin embargo éstos seguían activos horas después ¿Tiene lógica admitiendo la hipótesis del accidente? En absoluto. Por eso debemos plantearnos otras incógnitas por muy descabelladas que éstas nos puedan parecer. No sería de extrañar que este avión, con su tripulación y pasaje intacto, estén a punto de tomar tierra en las pistas del aeropuerto de Pekin. Para ellos habrán sido unos minutos de inquietante turbación, felizmente superada. Para nosotros un misterio que posiblemente podamos resolver en el futuro, cuando tengamos evidencias de que el vuelo MH 370, llegó a su destino puntualmente un día, un mes o un año después de nuestros días…de sus días, en pleno futuro. O quizá no podamos resolverlo nunca.