La mítica base “Área 51” sí existe en los EE.UU

Esta base, ubicada en el Estado de Nevada, albergaría los restos del accidente de Roswell que aconteció en julio de 1947 junto a otros restos espaciales recuperados posteriormente 

Carteles de aviso en el entorno de la Base
El jefe de la NASA, Charles Bolden, confirmó la existencia de la mítica Área 51, una base secreta militar estadounidense donde se estarían realizando estudios relacionados con la existencia de organismos vivos más allá de nuestro planeta; admitió también que cree en la posible existencia de vida inteligente en las profundidades del espacio exterior. Bolden aclaró, no obstante, que el lugar no es como el público lo imagina. Aseguró haber estado en un lugar llamado así, pero según sus declaraciones es un lugar normal de investigación y desarrollo. Y también dijo que nunca vio a ningún ser extraterrestre, ni naves espaciales ni nada de eso cuando estuvo allí.


Estas declaraciones las hizo al programa de televisión Hotseat. Personalmente opina que algún día el ser humano encontrará otras formas de vida o una forma de vida inteligente, si no es en nuestro sistema solar, sí en otros sistemas solares, en cualquiera de los miles de millones de sistemas solares que existen en el universo, dijo textualmente Charles Bolden. Fue en el año 2013 cuando la propia CIA, la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, reconoció la existencia de la base militar denominada Área 51 en Nevada, que fue utilizada para realizar pruebas de programas aéreos secretos durante el período de la Guerra Fría; allí se probaron aviones espías capaces de cubrir distancias muy largas y volar a gran altura, aunque no se menciona la existencia de estos restos accidentados que según otras fuentes, se almacenan en estas instalaciones secretas. Desde los años 50 comenzó a correr el rumor de que los restos del accidente de una nave espacial ocurrido en Roswel (Muevo México) y los cadáveres de varios presuntos alienígenas que tripulaban este ingenio extraterrestre fueron llevados a esas instalaciones tras ser recuperados por el ejército americano para su estudio y conservación. Otras fuentes aseguran que a esta base han ido a parar todas las evidencias materiales que se han ido recopilando desde entonces en otros casos similares.

Avión USA basado en tecnología OVNI
 Al “Área 51” acudió secretamente el propio Eisenhower cuando fue presidente entre los años 1953 y 1961. Inspeccionó las instalaciones secretas y a él se le atribuye una frase bastante enigmática. Se dice que al examinar una urna de cristal que contenía los restos de una de estas entidades biológica, sumergida en formaldehido, pronunció la famosa frase: “Señores ¿cómo es posible que estos asquerosos insectos lleven un adelanto tecnológico que nos supera en miles de años a nosotros? El secretismo gubernamental de todos los países con respecto a este tema es ya endémico. La negativa a reconocer la existencia de estas evidentes pruebas de la existencia de otras civilizaciones altamente avanzadas y la ridiculización de aquellos pocos científicos que se han atrevido a mencionar la evidencia son de uso corriente en todos los gobiernos, independientemente de su ideología política.

La propia existencia del “Área 51” fue negada durante años de manera vehemente y hoy, nada menos que por el responsable de la agencia espacial USA, se confirma su existencia, aunque los secretos que contiene se circunscriben al ámbito puramente científico de la investigación militar. Ya es algo, desde luego, aunque probablemente dentro de algunas décadas más, cuando otras evidencias sean conocidas por la población mundial y sea prácticamente imposible mantener el secreto, sabremos con certeza qué se oculta en esta base aérea de Nevada.