Los protagonistas, fotografiados en aquella época. |
Los protagonistas del caso fueron tres niños que dedicaban su tiempo a pastar el ganado. Tres niños de corta edad, analfabetos y sin apenas formación, habitantes de una zona rural del Portugal más profundo, con edades comprendidas entre 7, 9 y 10 años, Jacinta y Francisco Martos y su prima Lucía dos Santos, que aportaron su testimonio ante las autoridades religiosas y políticas portuguesas de aquella época. Las declaraciones de aquellos niños se redactaron en unas Actas que aún se conservan en los archivos secretos de Fátima, perfectamente custodiadas, así como una colección de negativos fotográficos que la Iglesia compró a los herederos de Josua Benoliel, el famoso fotógrafo luso que realizó el reportaje ese 13 de octubre.
Muchos años después, cuando ya la Iglesia católica, instigada por los jesuitas, había proclamado como verídica y sobrenatural esta aparición, exaltándola como auténticamente mariana, una investigadora portuguesa de renombre internacional, Fina D’Armada (1945-2014) Licenciada en Historia, investigadora y autora de ensayos sobre la historia de la mujer portuguesa, libros y artículos periodísticos en prensa internacional, tuvo acceso a las Actas originales redactadas en 1917; lo que halló en esos textos hizo que esta escritora-investigadora se interesara por un tema que hasta ese momento desconocía y a partir de ese encuentro con lo desconocido se inspiró para escribir varias obras junto al también investigador y catedrático universitario, Joaquim Fernandes siendo El Misterio de Fátima, posiblemente, una de sus obras más emblemáticas.
A lo largo de una serie de sucesivos artículos que se publicarán en este Blog, iremos incidiendo en el análisis desapasionado y riguroso de este misterioso Caso del que pronto se cumplirá su primer Centenario.
CONTINUARÁ....